Diego Pérez de Camino (1738-1796)

Catedral de Santo Domingo de la Calzada

Diego Pérez de Camino (Burgos, 9 de febrero de 1738 - Calahorra, La Rioja, 19 de enero de 1796)

Acta de bautismo de Diego Pérez de Camino. Fue localizada en el Archivo Diocesano de Burgos

El dato fue publicado el 5 de mayo de 2017 por Antoni Pons Seguí, de la Asociación Ars Hispana,

en la web de la entidad

 

   

Ubicación y vista de Burgos

Infancia

 Hasta no hace mucho el primer dato que se conocía de Diego Pérez de Camino databa de 1760. Algunas noticias todavía parecen "confusas", sin embargo, una breve cronología de ellas quedaría como sigue.

 Gracias al descubrimiento de su acta bautismal se sabe en que fecha nació el biografiado, donde, y quien era su familia, como se aprecia en la lectura de su texto: 

«Diego, hijo de Diego Pérez Camino y de María de Vibar. En la ciudad de Burgos a trece días del mes de febrero año de mill setecientos y treinta y ocho, Yo el Licenciado Dn Thomás Pérez Camino, Beneficiado en el lugar de Caiuela [=Cayuela], de licencia de Dn Joseph de Pereda, Cura Beneficiado en estas Parroquias unidas de Santa Águeda y Santiago de la Fuente, intramuros de ella, bapticé solemnemente a un niño, que se le puso por nombre Diego (Nació el día nueve de dicho mes), hijo legítimo de Diego Pérez Camino y de María de Vibar, vecinos de dicha ciudad, y parroquianos de dichas unidas; abuelos paternos, Diego Pérez Camino, natural de esta ciudad, y María García de Palencia, difunta, natural de la villa de Poza; maternos, Lorenzo Víbar, difunto, y Francisca Simón, naturales y vecinos de dicha ciudad; fueron sus padrinos Manuel de Llanderal y María Ysabel Fernández del Barrio, a quienes advertí el parentescto espiritual y demás obligaciones. [...]»

 Otro documento indica que en 1749, Diego, entro como niño de coro en la capilla musical de su ciudad. Ello fue gracias a sus dotes, pues sus padres eran humildes. Allí su maestro fue Francisco Hernández Illana, de quien se nota mucha influencia en sus futuras composiciones.

Juventud en Burgos

 Las primeras obras juveniles que se conservan de Diego Pérez de Camino son dos "cantadas" (tipo de composición) para los maitines de Navidad de 1758. Probablemente compusiera los villancicos de Navidad para los años 1760, 1761 y 1762.

 El 7 de noviembre de 1760 "Diego Camino, mozo de coro" solicita al cabildo de Burgos poder utilizar «hábitos largos». La siguiente vez que aparece en las actas de Burgos, esta vez con el nombre completo, es el 28 de febrero de 1763, en esta ocasión Camino, "clérigo de prima tonsura", informa al cabildo que ha sido elegido maestro de capilla de Santo Domingo de la Calzada en sustitución de Andrés de Bas que había muerto en noviembre de 1762, además solicita algo de ayuda para el viaje. El músico había sido nombrado maestro el 14 de febrero de 1763 después de ganar las oposiciones en que había actuado como juez el maestro de capilla y organista de la Colegiata de Logroño Juan José Llorente. Pidió y se le admitió como capellán de la congregación a pesar de ser tan solo clérigo de prima tonsura, así podía aumentar en algo su escaso salario.

Maestro de capilla en Santo Domingo de la Calzada

 Con el fin de aumentar algo más su renta, El 12 de octubre de 1764, tan solo año y medio después de su llegada a La Calzada, Diego Pérez de Camino solicito permiso para opositar a la colegiata de Villafranca del Bierzo, aunque era una iglesia de menor categoría, el cabildo dio su consentimiento a condición de que éste dejara quien cuidara de los seises. No debió obtener el puesto pues siguió apareciendo como maestro de capilla en el mismo lugar que estaba. Por las noticias que se tienen se sabe que Camino no encajó bien en Santo Domingo de la Calzada, existían fricciones con sus compañeros capellanes, con el cabildo en general y hasta con sus alumnos en el coro. Cuando en 1771 pidió licencia y cartas de recomendación para opositar a maestro de capilla de la catedral de Calahorra, el cabildo de Santo Domingo se lo denegó haciendo constar: «...no acreditar particular esmero en la enseñanza y adelantamiento de los tiples [seises]...». Camino, igualmente, realizó los ejercicios que se exigían para opositar a la plaza, a partir de ahí se inició un largo proceso contra uno de sus contrincantes, José Gargallo, hasta que al fin, el 19 de julio de 1777, Camino pudo anunciar que había ganado el pleito de Calahorra. Entretanto, el 14 de agosto de 1772, además de otros encargos, el cabildo de Santo Domingo acordó «prevenirle» que debía componer cada año una misa y unas vísperas. El 1 de febrero de 1773 la congregación le da el plazo de un año para que abandone la casa donde habita para arrendarla a Juan Montes, otro capellán que si era presbítero, al negarse Camino a la orden que le dan surgen desavenencias con otros capellanes, con el cabildo, y probablemente se ven involucrados los chicos del coro que seguramente son los «estudiantes que tiene de posada» a los que se acusa de maltratar la casa. El 13 de septiembre de 1773 se decidió contarlo como presente, aunque no asistiese a los oficios divinos, por estar componiendo un libro de motetes. Volviendo al litigio de Calahorra, el 8 de agosto de 1777 el cabildo de Santo Domingo leyó la carta de despedida de Diego Pérez de Camino. El 17 de agosto se leyó su despedida en la Congregación de Capellanes, donde fue felicitado. El 24 de agosto quien se despidió de todos fue el maestro quien donó a la catedral todas las obras que había compuesto «así de latín como de romance», se levanto un acta sobre el inventario de villancicos, himnos, misas etc. etc. conocido como «Memoria de los papeles que así de latín como de romance deja a la Stª Iglesia de La Calzada Dn. Diego Pérez del Camino, maestro de capilla de ella». Finalmente el 26 de agosto el maestro tomó posesión de su cargo en Calahorra.

Maestro de capilla en Calahorra

 Para obtener la vacante de maestro de capilla en Calahorra, Camino había disputado el puesto con: Francisco de la Huerta, músico de la catedral de Ávila, Juan Andrés Lombide, organista en Bilbao, José de Gargallo, copiante en la catedral de Zaragoza y Juan José de Arce, arpista de la catedral de Pamplona, también pretendía el cargo Francisco Juncá, segundo maestro de capilla de Santa María del Mar de Barcelona, pero éste pedía realizar los ejercicios en su ciudad, lo que no le fue concedido. Una de las obras de camino para la ocasión fue el motete Dixit Dominus ad Adam que debía componer a ocho voces en veinticuatro horas. Los jueces de la oposición fueron el antiguo maestro de capilla, Francisco Viñas, y el organista Matías Menéndez. En la votación que se realizó para elegir candidato Arce obtuvo un voto, Lombide cinco, Gargallo seis y Camino ocho. En una segunda votación entre los dos más votados obtuvieron 10 votos cada uno, a partir de ese momento comenzó el pleito al que ya se ha hecho referencia. 

 Casi veinte años estuvo Diego Pérez de Camino como maestro de capilla de la catedral de Calahorra, durante ese tiempo aparecen actas capitulares en que se estima su diligencia y el cumplimiento de sus deberes. También hay dos momentos menos positivos: el 27 de agosto de 1779 se le llamo la atención para que cumpliese con su obligación de dar lecciones a los chicos del coro. El segundo data del 15 de septiembre de 1787, cuando el deán informo que el maestro se había presentado «despidiéndose para ir a La Rioja», se especula que quisiera ir a regentar el magisterio de la colegiata de Briones. El cabildo le impuso una multa de 400 maravedises, pero lo más probable es que la razón de la sanción fuera la ausencia temporal del maestro, sin permiso y desatendiendo sus obligaciones, ya que Diego Pérez de Camino continuó en Calahorra hasta su muerte ocurrida el 19 de enero de 1796 «a las cinco de la mañana», como consta en la nota necrológica. 


 Camino fue un músico reconocido en su tiempo, lo demuestra el hecho de que en más de una ocasión ejerció como juez de oposiciones a maestro de capilla. Su legado musical consta de más de 400 obras.